En un taller de arteterapia se prioriza el
efecto terapéutico resignando un producto final estético y artístico, aunque no
dejan de tener importancia los crecimientos que suceden en la construcción de su producción plástica ya que de alguna
manera el equilibrio de la imagen, como se arman los colores y que se hace con
ellos, la repetición de un trazo, de un modo de pincelada o la ausencia de trazos,
color, y otros componentes de la imagen son el punto de partida primordial,
necesario para empezar a hacer y a la
vez la muestra de las limitaciones con las que se encuentra cada persona algunas
de ellas relacionadas con estado de padecimiento o alienación y otras por falta
de elementos técnicos de la plástica . Por eso es interesante estar atento a
los pasos aunque sea mínimos de cada uno de ellos para enriquecer el desarrollo
de la imagen que van plasmando, ya que uno siempre se está pintando a sí mismo.
Los procesos son distintos para cada uno y eso es importante respetarlo sin
exigir más de lo que en ese momento cada persona puede hacer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario